Por más que hayan pasado ochos años ya desde mi aterrizaje en España y el chileno es un obstáculo divertido a la hora de comunicar, hay muchas palabras que me resisto a abandonar. Una de ellas es «colorina». Para mí, aquellas mujeres hermosas de pieles blancas y melena roja siempre fueron las colorinas. En masculino era más chistoso, el colorín podía ser cabeza de cobre, ladrillo de princesa, duracell…en cambio las chicas eran siempre las colorinas. Creo que hay hasta una canción: «colorina, con tu canto de golondrina»….
Pues hoy han estrenado en Docúpolis -que se centra este año en personajes extremos- La Colorina, de Fernando Guzzoni y Werner Guisen. Un retrato precioso de la imposible, furiosa y rotunda Stella Díaz Varín, poetiza chilena, quizás la primera punk del país pasillo. Una más de las mujeres trágicas e incomprendidas del bestiario criollo, junto a doña Violeta y María Luisa, la Colorina.
Aquí el trailer.
Colorina, llena de color. Cómo la teleserie o los irlandeses que llegaban al colegio.
Peliroja, me suena a peliteñida, a falsa colorina, con casting