El famoso actor acaba de estrenar una obra de teatro en Madrid bajo su dirección. El revuelo es mayúsculo, el tipo muy reservado, la prensa rendida a sus pies, la obra un desastre y nadie dice nada.
Todo el mundo lo conoce y gran parte lo respeta. Es un actor de culto, bastante imborrable para la mente colectiva. Su vida privada se mantienen como tal y más allá del affair con Michell Pfieffer en “Relaciones Peligrosas”, que detonó la separación de su primera mujer, no se sabe mucho más. Es un tipo elegante, silencioso, que parace más inglés que gringo, que participa en películas buenas, malas y geniales y que desde hace un tiempo se encuentra alejado de las grandes luminarias. Pero nadie se olvida de él.
“Who the fuck is John Malkovich?” se pregunta uno de los personajes de la magistral película “¿Quieres ser John Makovich?”. El mismo aludido ha reconocido que la frase le hace mucha gracia y que le encanta junto con otra que se lanza hacia el final del filme : “Hei Malkovich…Piensa rápido!”, porque le recuerda a cómo lo trataban cuando era un niño gordito.
Difícil de olvidar cuando nos enloqueció con su magistral interpretación del conde Valmont en “Relaciones Peligrosas” de Stephen Frears, ese aristócrata perverso y encantador que destruía la ingenuidad de Uma Thurman, jugaba hasta la locura con el amor de Michelle Pfieffer y dejaba desencajada a la terrible Glenn Close. También interpretó a Mr. Ripley, el ezquizoide personaje de Patricia Highmisth y llegó al paroxismo ezquizofrénico con “¿Quieres ser John Malkovich?”, la increíble cinta de Spike Jones y escrita por el no menos genial Charlie Kauffmann, en la que John Malkovic entra por un pequeño túnel hasta el interior de su cabeza y ve un mundo lleno de malkovichs, que sólo se comunican repitiendo su apellido incesantemente.
Muchas películas han pasado desde los inicios de este gran actor de teatro y cine. Por citar algunas están “Retrato de una Dama”, de la australiana Jane Campion, “Con Air”, junto a Nicholas Cage, “El Hombre de la Máscara de Hierro”, “El Tiempo Recobrado” del chileno Raúl Ruiz. Muchos años han pasado también, el tipo está mayor ya, tiene una promimente calvicie, y su tronco comienza ese ligero acortamiento seguido de un pequeño inclinamiento hacia adelante, que terminará de delinear la figura de un hombre viejo. Hay que reconocerlo, ya no produce el morbo de antaño. Ha dejado las grandes producciones, no se sabe si para siempre, y últimamente ha participado en proyectos de extraña calidad dirigiendo una película sobre Sendero Luminoso, otra soporífera cinta del portugués Manoel De Oliveira llamada “Un Filme Falado” y actualmente rueda en Viena, nuevamente bajo la dirección de Raúl Ruiz, una película de ficción sobre los últimos años de Gustav Klimt. Además, hace un tiempo se encuentra trabajando en el guión de ‘Sobre Tumbas y Héroes’ de Ernesto Sábato.
También ha incursionado en otros proyectos como la creación de una línea de ropa diseñada por el mismo llamada Mr. Mudd; es propietario de un hotel en Gales llamado “The Big Sleep”, co propietario de un club en Nueva York – Man Ray- junto a Johnny Deep, Sean Penn, Mick Hucknall ( vocalista de Simply Red) y Harvey Weinstein (el rey midas de Miramax), además de otro club en Lisboa llamado Lux.
Entre tanto ha filmado pequeñas cintas sobre moda junto a la estilista británica Bella Freud, hija del pintor Lucien y bisnieta de Sigmund, además de rodar proyectos para la televisión francesa y dirigir obras de teatro en escenarios internacionales. Vive entre el encantador y burgués balneareo de Aix en Provence, al sur de Francia y París, por lo que siente propiedad para declarar que las diferencias entre su país natal, Estados Unidos y Europa son insalvables. Pese a todo, pese a decir que en Europa no miran dentro de sus propios gobiernos y que el rechazo francés a la invasión de Irak respondía sólo a intereses creados, los europeos lo aman y le perdonan todo. Es como a Woody Allen, que aunque sus películas van en franco deterioro, en Europa siempre brindan por él.
Entonces llega el emblemático, enigmático, ultral cool John Malkovich con un laureado guión de teatro escrito por un dramaturgo inglés, Terry Johnson, que va acerca de un encuentro entre el padre del sicoanálisis, Sigmund Freud y el chalado pintor surrealista Salvador Dalí. La obra se llama nada menos que “Histeria”. La expectación que crea está muy por sobre del término medio. Imagínese el trío: Freud, Dalí y John Malkovich…y de telón de fondo, en letras mayúsculas de color rojo, la palabra HISTERIA. Además imagínese esto en España, provinciana y acomplejada, igualita a nosotros, no pueden creer que John Malkovich dirija en un teatro español a actores locales.
Es una mañana lenta de domingo y se realiza la esperada conferencia de prensa entre el director y los medios de comunicación, con todo el elenco alrededor de él asintiendo como mono porfiado.
-“Es que trabajar con John es algo muy especial”…“Ha sido una experiencia increíble que me dirija John”…“Es que John te deja encontrar el camino de lo que tienes que expresar”…“John te repetirá las cosas una vez, dos veces, pero nunca tres”…“John es una persona incríble…es muy generoso.””Todos estamos enamorados de él”, repite intercaladamente el elenco.
Por su parte, la prensa española, le hace preguntas al director del tipo:
“¿Cree usted que el teatro cambiará el mundo?”
– No. No creo que nada cambie el mundo.
“¿Ha pensado en hacer una película sobre algún político español?”
– No
“¿Pasará a la historia como actor o director?”
– No creo que pasaré a la historia.
“¿Qué piensa de la prohibición de fumar en lugares públicos?”
– Que entonces hay que salir a fumar a fuera.
“¿Por qué dirige una obra sobre un hombre (Freud) cuyas ideas están en descrédito?”
– Las ideas de Freud siempre han estado en descrédito.
Está claro que nadie ha visto la obra o que no saben qué preguntar, o que -intimidados ante su presencia- le preguntan sin pensar mucho.
Intriga bastante el asunto idiomático. Cómo dirije en inglés a un elenco español con texto ya traducido. Además, encontrar a cinco españoles que hablen y entiendan inglés es tarea titánico.
“No, la verdad que el texto es tan rico que da lo mismo la tradución. Además, cada elenco aporta su propia interpretación, lo que lo enriquece más. Hay chistes, que son muy de teatro inglés, que no se pueden aplicar en otros países. Pero son sólo detalles ”, contesta con un tono pausado de silencios interminables. Pareciera que escogiera cada artículo, para que sea la oración precisa..” “A veces no tengo la palabra exacta en español, pero en la manera en la que ellos trabajan no hay problema. El único problema, que como el reparto no tiene un nivel de inglés muy alto, tengo que ser muy claro”.
Malkovich viene dirigiendo esta obra hace años, en distintos escenarios del mundo como Viena, Chicago, París, Londres, etc.. Cada vez con elencos y producciones locales. Es decir, a parte de él como director, todo lo demás cambia, a modo de franquicia. La fórmula es grito y plata ya que el nombre del director es reconocido y admirado en el mundo entero. Quién va a decir que no a una obra dirigida por él. Las entradas más baratas cuestan cerca de 35 mil pesos y se agotan día a día, sin posibilidad de compra anticipada.
Según lo que ha dicho, no lee críticas hace más de 20 años y le da lo mismo lo que la crítica diga de su trabajo. Entonces no se ha enterado que la crítica en España no ha hecho más que repetir las alabanzas de la prensa francesa cuando se estrenó “Histeria” el 2002.
La obra se presenta en un importante escenario madrileño en la plaza Colón. Las butacas son cómodas, de cuero y el escenario muy amplio. Malkovich, sicoanalizado hace algún tiempo, recrea un encuentro real entre Dalí y Freud, en el despacho de este último cuando se encontraba exiliado ya en Inglaterra. A partir de ahí todo es ficción. El decorado es bastante fiel a lo que se conoce como es estudio del sicoanalista judio. Durante dos o más interminables horas, ocurrirá un larga y lenta suceción de diálogos sin acentos ni giros drámáticos. Los cinco actores “enamorados de John” pasean por el decorado sin que sus acciones queden claras ni tampoco se justifique su existencia, como es el caso de Dalí, interpretando sin matices ni profunididad alguna. Tampoco el director juega con las figuras y símbolos, familiares para todos, del surrealista catalán ni del sicoanalista austríaco. Nada. Ningún recurso visual surreal o imaginativo, salvo a escasos minutos del final de la obra. Si algo está claro es que la dirección escénica a fallado. Los actores declaman sus parlamentos como el viejo del saco en mitad de la lluvia y nada explica sus acciones ni motivos. El público no se ríe con los chistes ya ensayados, a veces una que otra risa que sólo recuerda que la obra es un bodrio. Sorry Johny pero lo has hecho fatal. ‘Histeria’ termina y la gente aplaude educadamente, sin espetar ni ‘bravo’ ni levantarse de sus asientos y los actores sólo salen una vez a saludar. La gente se retira en silencio, prenden los celulares y probablemente tire pinta contando que vio la obra de teatro dirigida por John Malkovich.
Me encanta John Malkovich, es un Bonísimo actor, y Fidelísimo a su arte.
Excelente comentario sobre este tema… No he visto la obra en cuestion, pero hoy me entero que en Mexico sucedera algo similar… El Sr. Malkovich estrenara una obra en breve llama El buen canario y mi primera reaccion es similar a lo que dices… Los latinos tebnemos formas muy diferentes de sentir y el que un americano dirija una obra en otro pais, no es garantia que que sera algo extraordinario…
en la edición de playboy hay una entrevista a malkovich, denle una leída, la verdad es interesante saber un poco sobre el pensamiento de este hombre, solo visiten http://www.playboy.com.mx/
Nada todo lo que sea referente a él me encanta,es una persona super interesante e impecable en lo que hace.
No me importa una mierda lo que digan de él para mí es GENIAL.
Y antes que nada…nada él es antes que nada todo y todo es nada…jajjaja piensenlo lo que creen que es real no existe en verdad y lo que creen que no existe reboza en plenitud y extensión permanencia de visión ustedes son unos cerrados de mierda y esta pagina esta re poco visitada recién ingreso pero que pocos comentarios y que se yo me sorprende pero…lo real no se ve y lo irreal arraza si no miren a Dios,jajjaja.
¿Tendrá una página?jajaja.
Mejor me voy a fijar seguro sale el ´´papa santo´´ filio diputano.
Pelotudos de mierda a eso si le aplauden y rinden culto cerrados obtusos.